Lionel Messi volvió a brillar en una nueva presentación del Barcelona. El rosarino lideró la victoria catalana con cuatro gritos que dejaron sin posibilidades al arquero del Eibar, Dmitrovic. En tiempos en donde se exige una situación similar con la camiseta de la Selección, el mejor jugador del mundo encaminó la goleada con un preciso remate desde el punto del penal.
En el complemento sacó a relucir su magia y con un toque sutil estiró la ventaja para el elenco de Valverde que se mantiene en la cima de la Liga de las Estrellas. No conforme con su enorme producción, la Pulga continuó desparramando a la defensa visitante y en una tercera ocasión volvió a llegar a la red.
Incluso en el desenlace del espectáculo, el rosarino cerró el set para que el dueño de casa selle el 6 a 1 a su favor. En el Camp Nou sólo se escuchó la ovación en agradecimiento al mejor jugador del planeta.
La participación de Messi en el Barcelona fue fundamental para que el Culé siga como único