La provincia cerró el primer mes de 2018 con un balance muy positivo en materia turística. Argentinos de distintos puntos del país y extranjeros de las más variadas nacionalidades disfrutaron del enoturismo, la naturaleza, la ciudad y las actividades culturales.
El fin de semana largo generado por el feriado del 1 de enero, el punto de inicio de la temporada alta de verano, fue de mucho movimiento turístico en todo el país y nuestra provincia no fue la excepción ya que registró una alta ocupación.
Argentinos de distintos puntos del país y extranjeros de diferentes naciones decidieron comenzar el año en Mendoza disfrutando de las diversas propuestas que la provincia tiene para ofrecer en verano: enoturismo, naturaleza, ciudad y actividades culturales.
Según datos del Observatorio Turístico del Emetur, el promedio de ocupación provincial ponderado alcanzó el 78% en enero. El Gran Mendoza y el sur provincial presentaron los índices más altos de ocupación, el 79%, y el 75% respectivamente. Les siguieron Alta Montaña y Valle de Uco, ambas regiones con el 65%.
Durante enero, en promedio, se estima que el turista nacional gastó unos $1200 por día y por persona, mientras que en el caso del extranjero fueron unos $1500. El promedio de estadía fue de 4 noches.
Algunas tendencias observadas el año pasado se repitieron este enero. Una tiene que ver con el comportamiento de la ocupación, que es notablemente más elevada de jueves a domingo que el resto de la semana. Entre otros factores que explican el fenómeno, hay que destacar el movimiento de turismo interno, los mendocinos que eligen la provincia para descansos breves.
Otras tendencias notables que van en alza son la del “viajero espontáneo”, que llega al destino sin reserva, y también la cantidad de turistas que eligen quedarse en casas de parientes o amigos. Así, la cantidad aproximada de visitantes que pasaron por Mendoza en enero fue de 350 mil, distribuidos entre alojamientos formales y casas de parientes o amigos.
En cuanto a la procedencia, la mayoría fueron turistas nacionales principalmente de CABA y provincia de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, y las provincias limítrofes. Entre los turistas extranjeros se destacó la presencia de brasileros y chilenos, y luego del resto del mundo. Estos últimos llegaron motivados fundamentalmente por el producto “naturaleza”, donde se destaca el cerro Aconcagua. También el enoturismo, que es el atractivo principal durante todo el año.
El verano en nuestra provincia también es sinónimo de festivales y tradición. La nutrida agenda, además de darle valor agregado al destino Mendoza, es uno de factores que más influyen para elevar la ocupación de los alojamientos los fines de semana. En este sentido, la Ciudad de Mendoza, que cuenta con el 60% de las plazas registradas en la provincia, se destacó con una grilla diaria de opciones urbanas. San Rafael, por su parte, sobresalió con la temporada teatral y con los siempre atractivos ríos y espejos de agua.
Este año, además, a la playa de Luján de Cuyo, se sumaron las de San Carlos y General Alvear, que durante todo el verano ofrecen una alternativa refrescante y lúdica para locales y turistas.
Comentarios
comentarios
Leave a Comment