A 12 años de la sanción de la ley que la creó, tiene muchos impedimentos, incluidos los ideológicos y culturales.
Luego de 12 años de sancionada la ley de Educación Sexual Integral (ESI) la aplicación en los colegios es dispar, insuficiente y en algunos casos directamente nula.
La falta de presupuesto, escasa capacitación y recursos capacitados y cuestiones ideológicas y culturales se suman a un escaso control gubernamental sobre lo que efectivamente sucede en las instituciones. Tal escenario determina que en definitiva la información no llegue en el tiempo, forma y asiduidad necesaria.
Se trata de una de las banderas fundamentales de los dos grupos que se han manifestado y hasta confrontado en favor y en contra de la legalización de lainterrupción voluntaria del embarazo.
En realidad, entre quienes se oponen a la interrupción voluntaria del embarazo (los celestes) había segmentos que antes no avalaban la ESI y luego de la instalación del debate la aceptaron como una opción para evitar el aborto.
Sin embargo, y pese a que se trata de una norma nacional que implica garantías de acceso a esta, las clases en los colegios sobre la temática son eventuales, si es que existen.
En las secundarias estatales de la provincia es donde la aplicación está más avanzada, sin embargo, consultados sostienen que es insuficiente el tiempo que se le destina: dos horas mensuales para todo el colegio. Si se tiene en cuenta que las clases se dan por curso y no a un grupo grande, la conclusión a la que se arriba es que con suerte en promedio los alumnos de un curso pueden tener dos o tres clases al año.
“Las escuelas secundarias tienen horas otorgadas destinadas para eso y en algunos casos son usadas con otros fines como hacer tutorías”, mencionó Natalia Naciff, prosecretaria de Género y Derechos Humanos del Sute, el sindicato de docentes estatales.
Por otra parte, Miguel Conoscente, titular de la Dirección de Orientación y Apoyo Interdisciplinario a las Trayectorias Escolares (Doaite) de la Dirección General de Escuelas subrayó “todas las escuelas están obligadas a trabajar horas ESI, en secundaria además se suman las capacitadoras”.
Control
Por otra parte, los colegios deben presentar un proyecto institucional a comienzo de año, sin embargo, luego no se controla si se aplica ni con qué contenidos. Desde la Dirección General de Escuelas reconocen esto y por eso este año comenzaron a visitar establecimientos.
En secundaria la educación está a cargo de capacitadores sexuales. Pero en primaria no: allí se contempla que los docentes la incorporen como contenido transversal a la currícula (en el resto de las materias).
El asunto es que esto ocurre poco y nada, debido a que no son muchos losmaestros capacitados y la responsabilidad es delegada fundamentalmente en ellos. Incide también la iniciativa de los directivos sin embargo, en ambos casos la decisión está atravesada por criterios y consideraciones personales.
Sin control sobre la aplicación efectiva “solamente es un dibujo, sigue siendo un esqueleto vacío”, consideró Ana Vega, formadora de educadores en Sexualidad.
Privados
Por otra parte, salvo algunas iniciativas puntuales, aseguran que en las escuelas privadas hay muy poca presencia de estos contenidos, más aún si se trata de instituciones religiosas. Así lo destacó Ester Linco, secretaria general de Sadop, el sindicato de los docentes privados.
“ESI en las privadas todavía no tenemos, en las escuelas públicas se está empezando a incorporar, esto va a llevar un tiempo, es un proceso”, aceptó. Consideró que es importante que se realicen reuniones entre los gremios, el gobierno y referentes de los colegios para definir lineamientos y conocer los resultados y procedimientos de la aplicación en las públicas.
“Los colegios confesionales están resistiéndose”, subrayó y agregó que están educando para el amor y la familia.
Vega, explicó que la concepción de educar en el amor implica considerar la sexualidad en términos de reproducción con la finalidad de formar una familia, sin embargo desde el punto de vista de la ESI es más abarcativo.
Por otra parte explicaron que algunos docentes que tienen la intención de incorporarlo no lo hacen por temor a poner en riesgo su trabajo dado que desde el sector religioso se oponen.
De qué se trata
La ley N° 26.150 fue sancionada el 4 de octubre de 2006 con tan sólo un voto en contra en el Senado de la Nación.
“Establécese que todos los educandos tienen derecho a recibir educación sexual integral en los establecimientos educativos públicos, de gestión estatal y privada de las jurisdicciones nacional, provincial”, determina en sus primeros párrafos.
Considera el acceso a estos contenidos como un derecho propio de los estudiantes y crea el Programa Nacional de Educación Sexual Integral. Incluye desde el nivel inicial hasta el nivel superior de formación docente y de educación técnica no universitaria.
Entre sus objetivos destacados se cuentan asegurar la transmisión de conocimientos pertinentes, precisos, confiables y actualizados sobre los distintos aspectos involucrados en la educación sexual integral y promover actitudes responsables ante la sexualidad.
Ajustes
Miguel Conoscente señaló que para ajustar algunos aspectos este año se firmó una resolución en el marco del Consejo Federal de Educación que obliga a formarse en ESI a los responsables de la gestión institucional.
Por otra parte destacó que el gobierno nacional anunció hace un mes que va a triplicar el presupuesto asignado para ESI antes que termine el año.
Además dijo que este ciclo comenzaron a trabajar “a demanda”, es decir que acuden a las instituciones cuando los padres avisan que allí no se está cumpliendo el dictado. Para hacerlo debe gestionarse a través del correo [email protected].
Obstáculos
Del diálogo con personas vinculadas al tema surgen los principales obstáculos para la implementación de esta herramienta.
Presupuesto escaso: “A veces los recursos no llegan en tiempo y forma, algo común en el Estado. El presupuesto para ESI siempre ha sido poco”, dijo Conoscente.
Pocas horas de clase: En secundaria son 2 horas por mes para todo el colegio, en primaria no están estipuladas, en las privadas menos. Sin embargo, Conoscente destacó: “La única provincia del país que renta horas ESI es Mendoza”.
Escasez de docentes capacitados: “La situación actual tiene que ver con que falta mucha gente formada para dar educación sexual integral de acuerdo a la ley, que respete los parámetros de la ESI”, dijo Vega.
Aclaró que esto implica la capacidad de trabajar desde una perspectiva laica, científica y lo más libre de preconceptos, esto sería libre de sexosofía que es la propia filosofía de vida respecto de la sexualidad.
Cuestión ideológica y cultural: “Puede pasar que los directivos estén atravesados por mitos, miedos y prejuicios”, señaló Conoscente. Estas concepciones determinan la intención de incluir la ESI y los contenidos que se le atribuyan.
Oposición: Se trata de posturas más radicales de directivos, instituciones e incluso padres que se oponen a que esto sea incluido a nivel académico.
Falta de coordinación, control y acuerdo: “Está recayendo toda la responsabilidad en los docentes, tanto si se da como si no se da”, dijo Linco de Sadop. Explicaron que cuando se capacitan es por iniciativa propia y la inclusión de los temas en el aula también.
“Hemos pedido informes para saber cómo está la aplicación y no hay información oficial”, dijo Naciff en tanto señalan que no hay monitoreo para saber cómo se aplican los proyectos que los colegios presentan y si se aplican.
Poca capacitación: Aseguran que actualmente la capacitación es insuficiente, desactualizada y parcial, ya que abarca temas puntuales dejando otros afuera. “Se publican informes con determinadas temáticas pero no todas las puertas de entrada que proponía la ley y esto va en detrimento de la propuesta que es más amplia”, advirtió Naciff.
El lejano sur mendocino: La DGE dice que se ha ampliado al sur provincial donde no había llegado y había férrea oposición a la implementación.