La historia de un suceso muy triste y esperanzador. Un relato de dolor, alegría y solidaridad que vivió una familia sancarlina.
“Luján volvió a casa”, escribió Angelina Chanta Morsucci en su cuenta de Facebook, mucho más aliviada. El cofre celeste con las cenizas de su hija María Luján Micames (7) había sido recuperado, después del robo que sufrió la familia en su casa de La Consulta.
Habían ido a cenar el sábado por la noche a la Fiesta de la Tradición, que cada año se celebra en el anfiteatro Neyú Mapú, en la villa cabecera de San Carlos.
Entraron por una puerta ventana del dormitorio principal, en la parte de atrás de la casa, y se llevaron pertenencias y objetos personales. Recién en la mañana del domingo, notaron la ausencia del cofre.
“Tal vez se lo llevaron pensando que allí había dinero, joyas u objetos de valor. Estoy muy tranquila y agradecida por la solidaridad que muchas personas mostraron en un momento muy difícil”, afirmó la mujer.
Pero admitió también sentir “mucha bronca e indignación al saber que estuvieron adentro de mi casa, tocando mis cosas”.
Desde un primer momento lo único que Angelina quería recuperar eran las cenizas de su hija, ese valioso cofre, invaluable sin dudas.
A partir de ese instante, la mamá de María Luján inició un posteo en la red social Facebook que fue visto por miles de personas. Fue conmovedor el pedido de la mujer que permitió una rápida viralización, ya que sólo en unos pocos minutos fue compartido alcanzando más de 2.500 veces en unas horas y llegando a los 47 mil compartidos.
Angelina escribió: “Hola gente, anoche nos entraron a robar a nuestra casa cuando estábamos en la Fiesta de la Tradición, claramente buscaban plata. Se llevaron un monedero, una bicicleta verde Venzo, un taladro y un poco de plata. Pero lo más importante que se llevaron y que no se puede recuperar es un cofre donde estaban las cenizas de mi hija María Luján, seguramente pensaron que había dinero o joyas. Y como no pudieron abrirlo porque tiene llave se lo llevaron”.
El texto continuaba expresando: “Necesitamos que por favor sean solidarios y nos lo devuelvan, es una pertenencia muy valiosa para nosotros que nadie va a poder devolverla. Es un cofre muy bonito celeste, estamos muy tristes por lo que pasó. Sólo quiero las cenizas de mi pequeña, por favor ayúdenme!!!”.
María Luján Micames tenía 7 años y una vida por delante, hermosa y llena de sueños. La familia residente en La Consulta empezaba su viaje de vacaciones a Mar del Plata un sábado de enero de 2012, a bordo de la Renault Master, pero el destino les jugó en contra.
Una fuerte tormenta provocó un accidente en momentos que transitaban por la ruta 143 en el Paso de Las Carretas, cuatro kilómetros al sur de Pareditas, llevándose la peor parte la niña, que debido a los múltiples vuelcos fue despedida del vehículo.
La nena se había desprendido el cinturón de seguridad por unos segundos para sacarse la campera. María Luján sufrió las lesiones más graves y murió casi dos días después, en la madrugada del lunes, en el hospital Notti, generando una profunda tristeza y conmoción en esa comunidad del Valle de Uco.
Todos quisieron tener a la niña en la casa. Por eso el cofre con sus cenizas posaba sobre un mueble del living, donde pudiera ser visto a cada momento. Sentir su presencia.
Una vez hecha la denuncia policial, la búsqueda por cada zona cercana a la vivienda fue incesante. Se sumaron muchas personas porque sabían que la familia quería tener a María Luján otra vez en el hogar.
El martes por la mañana llegó la mejor noticia, la más esperada para que esta historia terminara con un final feliz. El cofre había sido encontrado en la tarde del martes por un vecino dentro de una acequia, a unos 100 metros de donde se lo robaron. Estaba intacto.
“Me llamó un vecino que lo había encontrado, pero se ve que la habían dejado hace poquito porque la Policía ya había rastrillado el lugar en la mañana y no vieron nada. A la siesta, un vecino salió a caminar porque seguían buscando el cofre por todas partes. Lo halló en una acequia cerca de donde encontraron el taladro que habían robado también”, contó Angelina.
Mientras que en su cuenta de Facebook, agradeció el apoyo de los mendocinos. “No tengo palabras para agradecer la solidaridad de toda la comunidad que nos ayudó a viralizar nuestra búsqueda desesperada. Mi corazón está en paz. Gracias. Gracias. Gracias”, afirmó Angelina, seguramente emocionada por reencontrarse con tan valioso objeto.
Seguramente la inusual repercusión que tuvo el mensaje de la mama en las redes, sumado a la marcada reiteración de la noticia en los medios nacionales sobre el triste momento que vivía esta familia sancarlina, fueron de gran importancia para que esta historia terminara de la mejor manera.
-Sábado 3. La familia de Angélica Chanta sale a cenar a la Fiesta de la Tradición y al regresar notan que delincuentes ingresaron a la casa robando varios elementos y dinero.
-Domingo 4. Angelina nota que los ladrones se llevaron el cofre con las cenizas de María Luján. Lo posteó en su cuenta de Facebook provocando en pocas horas 47 mil compartidos.
-Martes 6. Llegó la mejor noticia. Un vecino le avisa que encontró el cofre celeste en una acequia, un lugar que había sido revisado varias veces por la Policía y otros vecinos.