Además las productoras de aceites y harinas restringieron la entrega de mercadería.
Muy grave situación vive el rubro de la construcción, ya no tanto por la suba de precios, debido a la devaluación y suba del dólar, si no que además hay materiales que no se están entregando por el cierre momentáneo de los distribuidores. El hierro -y acero- más el cemento o las membranas asfálticas “no se pueden vender”, dijo el propietario de un corralón, mientras que de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Mendoza (Asinmet), su presidente expresó que “la situación es de tristeza” en una entrevista de Pablo Gamba en Radio Nihuil.
“Está complicado, porqué la mayoría de los proveedores no están entregando mercadería. Han suspendido las ventas. Tenemos grandes problemas porqué somos el último eslabón de la cadena y tenemos que seguir trabajando”, comentó José, el encargado de un gran corralón de la zona de Rodeo de la Cruz, Guaymallén, que confesó: “No puedo cerrar el negocio, tengo cuatro empleados. Vamos aplicando aumentos calculando aplicando un estimado para poder vender“, dijo.
Algunos valores en suba
Además, el comerciante se quejó de que “las ventas están muertas”, por la falta de entrega de los elementos. De todos modos José dijo que hay algunos materiales que sí se entregan, y que algunos aumentaron entre 10 y 30%.
Precisamente, en el caso de cemento portland, hubo un aumento del 9%, mientras que las pinturas llegó al 15%.
Finalmente el encargado del corralón explicó que “el hierro y la membrana no tienen precio. La membrana directamente no se puede vender. Sobre el hierro tampoco, ya que ayer (lunes) Acindar cerró sus puertas.
La metalúrgica parada
Sin duda que quienes más sufren la situación del corte de suministro de hierro y acero por el cierre temporal de Acindar es la industria metalmecánica. Por ellos habló Julio Totero, presidente de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Mendoza (Asinmet).
“La situación es de tristeza. Es lo que sentimos los que vivimos de la industria. Estas cosas no nos llenan más que de angustia. Esta situación de no saber el precio algunas materias primas, como el acero que es nuestro principal insumo”, dijo el camarista.
“Algunos proveedores no están diciendo que por ahí miércoles o jueves tengamos algunos valores. Como no hay una referencia clara del dólar, optan por no vender o entregar la mercadería con un remito abierto y para esperar el momento adecuado para facturar cuando el dólar se estabilice“, aclaró Totero, quien dejará la presidencia de Asinmet en septiembre próximo.
Finalemente el empresario, que también es vicepresidente de la Unión Industrial de Mendoza (UIM), se quejó de la situación monopólica del proveedor de acero (Acindar), que le pone un precio al acero de 1,30 dolares el kilogramo, mientras que en el resto del mundo el costo es de 0,70 dólares, y por eso pidió que “haya un control de comercio, para que no hayan monopolios y estas modifiquen sus precios a su antojo”.
Aceite restringido
Los principales proveedores de supermercados aclararon que no modificarán importes de productos que ya enviaron.
Sin embargo, estiman una remarcación de entre 5% y 10% para los que tienen que entregar en los próximos días.
Si convalidan las nuevas listas de precios que les envían sus proveedores, deberán aumentar.
En caso de que no acepten, el riesgo es que aparezcan algunos signos de desabastecimiento.
Una compañía que participa del programa oficial de Productos Esenciales ya avisó al Gobierno que no puede seguir trabajando con los importes actuales.
Las cadenas notificaron a la Secretaría de Comercio, pero quedó pendiente una definición.
Las petroleras aparecen como las más afectadas por las movidas del dólar, y ya estarían preparando remarcaciones en los surtidores.
Los productores de harina y aceite, que pueden optar entre exportar y cobrar en dólares, o dedicar su producción al mercado interno, donde no sabe cómo será compensado, están en el centro de todas las miradas.
Los fabricantes de electrodomésticos, en tanto, frenaron las entregas y se están tomando dos o tres días para evaluar los nuevos precios.
En tanto, algunas cadenas de supermercados mantienen los precios en este rubro.
Lo que se venía moviendo este rubro se debía al Ahora 12, que también deberá readecuar sus tasas de interés, luego de la suba de 10 puntos del lunes.
Por la inestabilidad del dólar, los molinos harineros no entregarán harina a las panaderías por algunos días, ya que no tienen un precio de referencia para la bolsa de 50 kilos.
El presidente de la Asociación Panaderos de Rosario, Gerardo Di Cosco, señaló: “Nos han informado que han suspendido la venta de harinas, debido a la inestabilidad que hay en el dólar”.
“Llamamos a la reflexión en un momento muy complicado de nuestro país. Les pedimos a estas grandes empresas que pongan un poquito el hombro para ayudar, puesto que estamos en una situación donde la gente está pasando hambre”, sostuvo el dirigente.
Según Di Cosco, los panaderos deben “poner la cara con el cliente y decirle que sigue aumentando este producto básico en la canasta de los argentinos. Por eso tenemos que hacer el esfuerzo y entre todos salir de este momento difícil que estamos pasando los argentinos”.
“Hay una preocupación muy importante. No venden harina en todo el país porque están esperando que se acomode el dólar, pero yo no puedo aumentar por aumentar, la gente tiene que seguir llevándose el pan”, enfatizó.
Por su parte, Juan Carrillo, de la Asociación de Panaderos de Mendoza, dijo que “se produjo la suspensión de la venta de harina, pero calculo que también pasará lo mismo de otros insumos de panadería”.
“La medida molesta. No se tiene precio de referencia y para evitar equivocarse prefieren suspender las ventas por dos o tres días”, indicó el dirigente.
En tanto, el presidente del Molino Matilde, René Mangiaterra, explicó: “No es la primera vez que vivimos esto. Pero no hay que generalizar. Estamos vendiendo un insumo, una materia prima tan básica, y en general no desaparece de un día para otro”.