También son sospechosos un es celador de una escuela y un empleado de la Municipalidad de San Carlos.
Mientras permanecen la conmoción y el escándalo en San Carlos por la denuncia de tres hermanas que habrían sido abusadas hace unos 10 años por dos hombres, la investigación comienza a tener sus primeras medidas y los detalles trascienden de a apoco. No se revelan las identidades al tratarse de un delito de instancia privada, pero se supo que uno de los acusados fue padrastro de las víctimas.
Uno de los sospechosos fue pareja de la madre de estas chicas durante años y, presuntamente, habría “aprovechado” que vivían juntos para vejarlas. Esto no es un dato menor, ya que la convivencia y la guarda de menores resultan un agravante de los abusos.
De confirmarse estos hechos, en un futuro juicio el padrastro podría arriesgar de 8 a 20 años de cárcel. Otro agravante podría ser la participación de dos personas en los hechos, hipótesis que se analiza al ser dos los acusados.
La denuncia se realizó el sábado pasado, y lo primero que ordenaron los pesquisas fueron las pericias psiquiátricas para las hermanas para intentar corroborar sus relatos. Una de ellas declarará en cámara Gesell por su edad -tiene 15 años-, más allá de que todas eran menores cuando habrían sido abusadas. Las otras hoy tienen 21 y 18 años.
Fuentes consultadas admiten que la causa es difícil porque deben investigar hechos que pasaron hace mucho y porque no cuentan con pruebas ni exámenes físicos. Sí desde la fiscalía se ha citado a testigos que podrían dar detalles.
Las jóvenes detallaron que sufrieron tocamientos, masturbaciones y sexo oral. Los sospechosos -uno es celador de una escuela y el otro trabaja en la Municipalidad de San Carlos- no han sido detenidos ni citados por la Justicia.