Durante la semana inicial de enero salieron de Argentina por el Paso Cristo Redentor casi 8% más personas que el año pasado.
En vez de “carrete” salen de joda, en vez de “quitasol” usan sombrilla y cambian el piscola por el fernet. Son los argentinos que por estos días han copado las playas de Reñaca y Viña y han hecho que los modismos y costumbres chilenas sean utilizados por una minoría.
Es que según información del paso fronterizo Los Libertadores, entregada por Gendarmería Nacional de Argentina, durante los 8 primeros días de enero 74.793 personas cruzaron hacia el país trasandino, de los cuales se estima que la mayoría tiene a la región de Valparaíso como destino.
Este número marca un nuevo récord si se lo compara con el mismo período de 2017- año que ya había superado las marcas anteriores-, cuando realizaron el cruce 69.383 personas. En resumidas cuentas, los viajeros aumentaron casi un 8%.
De todas formas el verano recién comienza y todavía falta la visita del Papa Francisco (del 15 al 18 de enero), por lo que se espera que el porcentaje de aumento crezca aún más.
De hecho desde Gendarmería adelantaron que entre el 12 y el 15 de este mes cruzarán 200 micros por día, cuando en lo que va del 2018 el día que más pasaron fueron 70.
En Reñaca ya notan una gran afluencia y se esperanzan con que la llegada de argentinos siga creciendo. “Santiago ya tiene copadas las reservas para la llegada del Papa, seguro que va a pasar los mismo en Reñaca, porque como está cerca muchos van a elegir quedarse acá”, adelantó Rodrigo desde la recepción del Hotel Montecarlo. Él precisó que allí durante la primera semana de enero tuvieron las reservas al 90%.
“Por el momento tenemos la mayoría de mendocinos, pero también he notado gente de Córdoba y La Plata que vienen del Atlántico al Pacífico”, comentó.
Desde el hotel Piero´s, ubicado en el centro de la ciudad, tuvieron una percepción similar. “Noto igual cantidad de argentinos que el año pasado, pero puede que del 15 en adelante sea mucho más”, dio Patricio el conserje de turno. Para él Reñaca se ha convertido un destino predilecto de la juventud, pero también sigue atrayendo a las familias.
María Vergara, quien tiene departamentos en alquiler todo Valparaíso, agotó todas las reservas a partir del 14 de enero. “Muchos de los argentinos a los que les arrendé tienen pensado ir a Santiago a ver al Papa por el día, pero después vuelven y se quedan unos días más veraneando”, dijo María.
Junto al mar
Mientras más gente cruza por el Túnel Cristo Redentor en las playas de Reñaca el mate cada vez gana más terreno. Pero no son son mendocinos los que lo portan, sino cordobeses y porteños, ya que son cada vez más los oriundos de esas tierras que eligen el Pacífico.
“El 80% de Mendoza está acá” aseguró Leonardo D´Alessandro, quien decidió vacacionar junto a su esposa Cecilia y sus tres hijos Sol, Maximiliano y Geremías. Ellos llegaron el 30 para disfrutar los fuegos artificiales de Año Nuevo como muchos otros comprovincianos.
“Si bien estaba bastante lleno, por suerte nos resultó fácil encontrar alojamiento, no nos gusta alquilar desde allá”, reconoció. Antes de partir el mendocino contrató el Soapex y revisó que su vehículo tuviera la verificación técnica. “Por suerte no nos pidieron nada”, comentó.
Las amigas mendocinas Amparo, Agostina, Romina, Florencia, Catalina y Martina, arribaron el 6 y se quedarán hasta el 14, antes que el Papa Francisco llegue a Chile.
“Solemos venir siempre con las familias, pero esta vez vinimos todas juntas”, relataron. Ellas encontraron la ciudad colmada, no se imaginan como podrían llegar aún más visitantes. “Hay mucha gente, ya nos parece demasiada”, dijeron entre risas y acotaron que las sorprendió la cantidad de gente de Córdoba y Buenos Aires.
Los Falcati eligieron compartir el descanso estival todos juntos: “Vinimos desde el 28 a pasarla con nuestros cuatro hijos, novios y agregados”, comento Gustavo, el papá.
Él también observó menos mendocinos y más gente de Buenos Aires y Córdoba. “Parece que les ha empezado a gustar venir más para acá”, comentó. El grupo familiar pasa sus tardes entre cartas, mate y mar.
Con un marcado acento cordobés, Mariano Pera charlaba con dos amigas mientras esperaba la puesta del sol. “Vinimos con un grupo de compañeros de la facultad porque nos contaron que se llena de jóvenes y no nos mintieron”, aseguró con satisfacción. Si bien él no tiene pensado ir a ver al Papa, un compañero de su grupo sí lo hará.
Precios playeros
Aunque muchos mendocinos ya llegan a la playa con sus propias provisiones para pasar la tarde y no tentarse, frente a la costa se puede conseguir de todo para darse un “gustito” extra. Los precios son los siguientes:
-Lata de gaseosa: $800 chilenos (unos $25 argentinos)
-Botella de gaseosa de 350 cc: $1.000 chilenos ($32 argentinos)
-Botella de cerveza: desde $2.000 chilenos ($63 argentinos)
-Helados industrializados: de $500 ($ 16 argentinos) a $1.500 (48 argentinos)
-Licuado: $2.500 chilenos (78,50 argentinos)
-Jugo de frutas: $2.000 chilenos ($63 argentinos)
-Trago con alcohol: desde $5.000 chilenos ($157 argentinos)
-Paquete cuchuflí: $500 chilenos ($16 argentinos)
–Paquete de palmeras: $500 chilenos ($16 argentinos)