Fondos enviados la semana pasada a todas las escuelas por el Gobierno provincial, permitirán realizar arreglos de los edificios para la aislación de puertas y ventanas y todo artefacto que brinde calefacción. Y se aplicará un sistema de monitoreo para que ninguna escuela se quede sin gas en su zepelín.
Ante la llegada de los meses más fríos para el Valle de Uco, la Delegación Regional de la Dirección General de Escuelas comunicó varias medidas adoptadas para brindar las condiciones necesarias en el cursado de clases. Por un lado, “ninguna escuela se calefaccionará con estufa a leña (salamandras mayormente) que es como lo hacían muchas escuelas hasta el año pasado”, informó la Delegada de la DGE en el Valle de Uco, Silvia Cornejo. Las últimas escuelas de montaña que utilizaban este precario sistema de calefacción ya no lo hacen desde el año pasado, cuando se instalaron zepelín y todos los artefactos y cañerías para el funcionamiento del sistema.
Paralelamente, “desde hace dos años, y éste es el tercero, desde el Gobierno provincial se ha venido destinando un fondo especial para calefacción para todas las escuelas de la provincia. Este fondo no es para adquirir nuevos bienes, sino para acondicionar los ya existentes en las escuelas”, explicó Silvia Cornejo, y detalló lo que la DGE comunicó a principios de la semana pasada, que “ese fondo ya está depositado en todas las cuentas de todas las escuelas”.
Este fondo especial, que por tercer año se entrega a los establecimientos educativos al inicio de los meses fríos, sirve para que las escuelas realicen arreglos y acondicionamientos de los edificios para la aislación de puertas y ventanas y todo artefacto que brinde calefacción.
Principalemente se apuesta a que ninguna escuela suspenda el dictado de clases por falta de gas. En relación a situaciones que se presentaban años anteriores, la Delegada Regional informó: “había una deuda importantísima cuando ingresamos en la gestión, de 40 millones de pesos con YPF. Por eso muchas de las escuelas no tenían el servicio, y veníamos con problemas para la carga de gas. Eso se pagó y se refinanció, y en lo que va de la gestión –un poco más de dos años- nunca hemos tenido que suspender clases en alguna escuela por falta de gas”, referenció la funcionaria del Gobierno provincial.
“Hoy también podemos decir que todas las aulas tienen calefactores. El año pasado se realizó una inversión importantísima: se entregaron cien calefactores a las escuelas del Valle de Uco”, recordó Cornejo, informando además que desde que se canceló la deuda con YPF, “existe un sistema de monitoreo por el que se realiza el seguimiento de los zepelín, en donde las escuelas deben comunicar cuando queda un 40% de llenado. Esto se va informando a YPF para que planifique la carga de los mismos con tiempo, y puedan cumplir”.